miércoles, 1 de junio de 2011

Terrora y Taboo, de Cecilia Pego



Hoy día, el respeto por los medios, por su enfoque y por las capacidades de quienes firman en ellos es algo que se ha ido perdiendo. Realmente parece que estamos llegando al punto absoluto de la entropía, y quién sabe qué vaya a suceder en unos años o meses. Pero hubo un día (léase como si lo dijera sin dientes y silbando) en el que se percibía una intensidad en la información, y daba pie para más muestras de energía y originalidad.

De esa forma, durante el cierre de los años 80 y buena parte de los 90, el diario La Jornada permitió la publicación entre sus páginas de un suplemento dominical estrambótico, mágico y genial llamado Histerietas. Éste, abrevando de otros experimentos anteriores del entonces respetable diario unomásuno, cuajó como una tribuna sin precedente en el diarismo donde coincidieron una buena cantidad de historietistas y caricaturistas que celebraron la libertad para divertirse de la mejor manera que su musa particular les permitiera.

Recordamos con mucho cariño, respeto y admiración tiras de autores brillantes, de generaciones distintas, pero coincidentes en necesidades expresivas. Entre esas obras están, en primer lugar, El Santos (de Jis y Trino), siguiendo otras como Mike Goodness y el cabo Chocorrol (de El Fisgón), La vida en el Limbo (de Ahumada), Buba (de José Quintero), las varias series de Luis Fernando, así como Terrora y Taboo, de Cecilia Pego.

Y aunque pareciera que apenas fue el pasado domingo que vimos por última vez el suplemento Histerietas, se le extraña, y mucho. Por eso es que las recopilaciones que se han ido dando poco a poco de las distintas obras que lo conformaron son guardadas prácticamente como tesoros. A éstas, felizmente, ahora podremos sumar una de Terrora y Taboo, selección de esta obra de culto por Cecilia Pego, y publicada por Samsara Editorial.

En el mencionado suplemento de historietas malsanas y felices, sobresalió un humor caustico e inteligente. En el caso de Terrora y Taboo las triquiñuelas del humor negro se armaban en base a la presencia protagónica de la terrorista freelance y amante de sociópatas, Terrora, y su sidekick Taboo, un gato cruzado con piraña de unas patas minúsculas y cuerpo de piñata. Terrora, de figura cercana al espigado perfil de Cesare (Das cabinet des Dr. Caligari) o a la Irma Vip de Les vampires, vivía en el tramafat constante ante sus frustrados intentos por crear el caos en un mundo cada vez más cínico y peligroso.

Se trata de historias autoconclusivas de una o dos páginas; una especie de catálogo de psicopatologías y frustraciones a fin de siglo que, en lo personal, me recuerdan un poco a las Fábulas Pánicas que Alexandro Jodorowsky presentó durante los años 70 en el fenecido diario El Heraldo de México. Si bien, el genio pánico buscaba legar enseñanzas zen en base a historias absurdas y ridículas, en Terrora y Taboo se ridiculizan y confrontan las paranoias del momento histórico a través de la opinión de su autora. Cecilia Pego legaba así un valioso comentario sobre la sociedad a través de una visión de género muy autocrítica.

Aunque los intentos –por ejemplo- de Terrora por volar una estética (y, en lugar de ello, lograr un nuevo corte de cabello) o interactuar eróticamente con un multihomicida multimedia (cuyos rostro, cuerpo y hasta mente, son prestados por otros individuos) resultan infructuosos en una sociedad organizada a partir de las apariencias, la individualidad y el vigor de Terrora resultan en una individualidad heroica y loable en medio de un mundo mediatizado, idiotizado y manipulado.

Terrora y Taboo, la recopilación con lo mejor de estos personajes, obra de Cecilia Pego, en una edición limitada publicada por Samsara Editorial, se presentará este sábado 4 de junio, a las 14:00 horas en el Salón Palenque del World Trade Center (Filadelfia, s/n, col. Nápoles), en el marco de la Comic Con México. La presentación estará a cargo de la autora, el editor Sergio Santiago Madariaga y quien esto escribe.

A continuación les dejó una entrevista con la autora, a propósito de esta recopilación.



Creo que a pesar de la apertura que se ha dado en la historieta, este medio continúa siendo una especie de Club de Toby. Ante esto, en tu caso, ¿qué es lo que lleva a una mujer a realizar historieta?
Para mí fue inevitable hacer historieta. Creo que si no hay más mujeres en el cómic, no ha sido por culpa del machismo dentro de la industria editorial, sino del macho interior que algunas mujeres llevan dentro. Y ese macho interior, que es la autocrítica y la autocensura, es lo que realmente puede limitar a una mujer artista.

¿Qué es lo que te lleva a hacer una historieta como Terrora y Taboo, una que precisamente es muy crítica de los estereotipos femeninos y masculinos?
Mi intención con Terrora era crear un personaje femenino sin límites, adicta a la adrenalina que explorara la locura hasta sus últimas consecuencias. Fue una manera de explorar mi propia oscuridad a través de un personaje de ficción.

¿Fue acaso más complicado publicar en un diario siendo mujer?
Nunca sentí que ser mujer dentro del medio me hiciera las cosas más complicadas o más fáciles. Creo que me he tenido que enfrentar a los mismos retos que mis colegas hombres.

Se sabe que en Histerietas se llegó a censurar alguna historia de El Santos, desconozco si se dieron otros casos. ¿Tú tuviste algún problema de esta índole?
En general no había problemas de censura en Histerietas. Como editor de la sección, Magú promovía la experimentación, tanto ideológica como estética. No había demasiados problemas de censura porque no se tocaban temas políticos en ese suplemento. Sin embargo, cuando yo hacía caricatura política en el Diario de Juárez en los noventas, tenía que aplicar la autocensura antes de que me censuraran. Los cartones tenían que ser crípticos para poder publicarse. En aquella época no había tanta libertad de expresión. Ahora se puede crítica a través de la caricatura, pero siento que ya no tiene ningún efecto sobre la política. El cinismo ha provocado que todos esos cartones sean parte de la egoteca de los políticos, un adorno dentro de sus descaradas campañas de relaciones públicas.

¿Qué pasó con TyT, por qué no seguiste haciéndola tras Histerietas?
Cuando el suplemento de Histerietas desapareció de La Jornada, decidí dejar de hacer historieta y dejar los medios impresos para dedicarme a la pintura. Todo eso provocó que cambiara mi estilo, mis temas y que descubriera a Exilia, mi nuevo personaje...

Mucho de lo que ironizabas en TyT es ahora más evidente que hace 15 años. ¿Si continuaras ahora la historia tendrías que cambiarla en algo?
Terrora continuaría haciendo sus experimentos de terrorismo sicológico, pero ahora estaría mucho mejor equipada. Su principal arma sería su iPhone con sus Apps mortales. Las frustraciones amorosas con sus amantes sociópatas serían mucho más complejas. Pero ahora ya no se sentiría atraída hacia terroristas y asesinos seriales, sino que tendría relaciones románticas virtuales con hackers chinos y piratas somalíes. Tendría una gran actividad en las redes sociales como Twitter y Facebook, pero ahora buscaría tener fans en lugar de víctimas...



¿Cómo ves el estado actual de la historieta mexicana?
Las casas editoriales están comenzando a interesarse en el género. Se han publicado varios libros en el 2011, creado concursos de novela gráfica y se han comenzado a distribuir en librerías no especializadas. Cada autor tiene un estilo gráfico muy particular, pero creo temáticamente todos estamos explorando la fantasía y el mundo interior. Será fascinante ver qué pasa en los próximos años...

¿Eres lectora asidua de cómics en general, qué autores te gustan, o prefieres el cine, la literatura, teatro, etc?
Mis autores favoritos de historieta son Alan Moore y Crepax. Pero prefiero leer novelas: Conrad, Dostoyevsky, Orwell, Lovecraft y Palahniuk, son mis escritores predilectos. Pero sin duda, lo que más consumo es cine: Tarkovski, Bergman, Herzog, Lars von Trier y Kubrick son mi principal fuente de inspiración...

¿Cuándo podremos ver Exilia, tu primera novela gráfica, y de qué va?
Saldrá antes del Apocalípsis del 21 de octubre de 2011. Se publicará primero como ebook y el lanzamiento será desde mi estudio a través de Livestream por internet.
Exilia es una fantasía futurista post-apocalíptica. Son los diarios visuales de una ex novicia sobre sus exóticas expediciones a mundos que habían permanecido invisibles hasta ese momento y en donde debe resolver un misterio, arriesgando perder su cordura.

¿En esta recopilación de Terrora y Taboo aparece todo su material o hacen falta, hubo modificaciones en algunas planchas?
La recopilación contiene lo mejor de Terrora. Algunas historietas están modificadas, pero sólo para ampliarlas, escenas extras que hubiera querido que salieran publicadas en Histerietas de La Jornada pero que por falta de espacio nunca pude incluir. El libro se editó como siempre quise presentar el mundo de Terrora y Taboo.

*Las imágenes fueron tomadas flagrantemente del blog de Cecilia Pego, correspondiendo las dos primeras a Terrora y Taboo, mientras que la última es una imagen de Exilia.

7 comentarios:

Rik dijo...

Cuando la leía en HISTERIETAS realmente no me gustaba Terrora. ahora, después de leer tu escrito, las imagenes y leer su entrevista, iré inmediatamente a hacerme de ésta recopilación. De nuevo gracias por la recomendación.

M. Cole dijo...

Fui fan de Terrora y Tabú en su momento. Me gustaba mucho la limpieza del trazo y la ausencia de sordidez de su humor negro que ya de cerca se antojaba un cristal obscuro. Luego, veinte años después tuve la fortuna de ser presentada virtualmente -¿cómo si no?- a su autora. Y ahora soy fan de Terrora, Tabú y toda la palomilla pero sobre todo fan de Cecilia Pego. Gracias por el texto y la entrevista.

Morningstar dijo...

Rik, a mí siempre me gustó TyT, y ahora que lo leo tras tres lustros y compilado me ha resultado muy intenso (y Exilia se antoja mucho). Creo que en esta relectura te gustará.
M.Cole, gracias a ti por atender el texto.
Saludos

silent Bob dijo...

hace tantísimos años ya que el santos, terrora y taboo y la vida en el limbo fueron mi iniciación en la narrativa ilustrada (no tenia yo ni nueve años, no entendia un 50% de las historias, pero ya sabia que algo grande había ahí... deberían hacer un compilado del Histerietas en pasta dura, URGE!)... el trabajo de Jis y Trino siempre ah estado ahi en libros, pero a Terrora vaya que se le extrañaba, que gusto este compilado (no creo ir a la comic con el domingo, no sabe, maestro, si estará disponible desde mañana (que sí iré)).. por cierto, que opinion le merece, de primera entrada, esta comic-con mexico

Morningstar dijo...

Qué onda, Silent Bob.
Sí, tengo entendido que Cecilia Pego estará presente los tres días en el espacio de artistas independientes, donde firmará el libro y, de hecho, hoy viernes hay una mesa de discusión con ella, Juanele y Luis Fernando, me parece que a las 12, así que igual puedes checar esa.
En cuanto a la Comic Con, pues entiendo que es el inicio de un esfeurzo por rescatar las conveciones, y hacer a un lado los tianguis en los que éstas se han convertido. Yo esperaría más invitados y conferencias, pero esta es la primera y creo que no está tan mal. La próxima semana me parece que se lleva a cabo otra, la Expo Comic creo, y creo que el esfuerzo es parecido. Espero que ambas prosperen.

silent Bob dijo...

ya fui! tuve el libro no. 2 de "Terrora y taboo" dedicado y todo... que bella es Cecilia! :)

y al final pues no estuvo tan mal, si hubo muchisimos detalles de organización, pero por lo menos no es el tianguis de piratería que se ah vuelto la mole y la tnt (y no estuvo el que doblaba al sr. Burns! jaja) pero si habia que llevar una buena lana para salir satisfecho de ahi!! me quedé con ganas de mucho.

Pero bueno, como dices: ojalá prospere y vaya creciendo, particularmente con invitados internacionales.

Morningstar dijo...

Qué bien que pudiste ir, Silent. Sí, Cecilia y su obra son encantadoras; y mira, qué bien tener la copia número 2. Esperemos poder ver pronto publicada su novela gráfica Exilia.

La Comic Con tuvo problemas de organización e igualmente faltó oferta editorial y de eventos; pero, a pesar de eso, se agradece que haya este intento por rescatar el concepto de una convención de cómics. Esperemos que crezca para la siguiente edición.